ECOVAN STORE HA CERRADO
Lo has leído bien, sí, Ecovan Store ha cerrado las puertas de la tienda.
Escribo esto sin tristeza, sorprendentemente contenta, satisfecha y con muchísimas ganas de lo que me depara el futuro. No llegué a imaginar la gran liberación que sentiría en cuanto tomara la decisión definitiva y empezara a materializarla.
¿Por qué he tomado la decisión de cerrar?
Seguramente te hagas ya una idea, lo típico, el abuso extremo que reciben los autónomos y autónomas en este país, los malos hábitos de consumo de la mayor parte de la sociedad, Amazon, el creciente y desmesurado greenwashing que aparece en más cantidad que la avanzada campaña de setas de este año, Amazon otra vez, la gran subida de precios de este último año, el engaño brutal que es Planeta Huerto, que para quién aún no lo sepa es propiedad de Caprabo y tiene de sostenible y ético lo que yo de Barbie… pero todos estos puntos, aunque han sido un gran factor a tener en cuenta son navegables. El motivo real de por qué he decidido cerrar esta etapa es que estoy drenada, Ecovan ha sido el proyecto más maravilloso en el que me he lanzado hasta la fecha.
Estoy jodidamente agradecida de las personas que Ecovan ha cruzado en mi vida, de que tú formes parte de ella.
Esta comunidad me ha aportado tanto apoyo, acercado a tantas personas a las que ahora llamo amigos y amigas con orgullo que no puedo prácticamente sentir tristeza mientras escribo estas líneas.
Pero la realidad de un emprendimiento así es que desgasta. Llevo más de un año en que los contras de seguir adelante pesan más que los pros y he llegado al punto de que necesito salir de lo que se había convertido en mi zona de confort y priorizarme a mí, volver a encontrar la motivación en mi día a día y en mi trabajo. Es por esto que siento la necesidad de cerrar esta maravillosa etapa y centrarme en los proyectos bru-ta-les en los que ya estoy metida y que tengo la gran suerte siguen girando en torno al mundo de la sostenibilidad, el cambio social, el activismo medioambiental y lo que más me ha gustado siempre, menear un poco el “status quo”.
Después de un merecido descanso, decidiré cómo seguir dando voz a mi activismo. Por el momento, os dejo el blog activo para que podáis seguir consultando los artículos y quién sabe, quizá algún día no muy lejano me inspire para escribir otro.
No quiero despedirme sin agradecerte de corazón que hayas estado aquí, apoyándome, tomando decisiones y acciones sostenibles, éticas y que priorizan un tejido social sano y autosuficiente. Nada de lo que pueda escribir logrará captar lo sincera y plenamente agradecida que te estoy, así que simplemente gracias, de verdad, gracias.
Laia